Uno de los problemas asociados a las olas de calor y temperaturas excesivas es el riesgo real de deshidratación. Beber abundante líquido, en especial agua, es la mejor forma de prevenir problemas.
En este sentido, el pepino posee un 96% de agua, además de potasio, vitamina C y fibras. Se ha de consumir crudo para poder aprovechar todos los beneficios. También cabe destacar la sandía, rica en vitamina C, e ideal para tener una piel hidratada y aumentar las defensas del cuerpo. Esta fruta también contiene elevados niveles de agua y reduce el riesgo de enfermedades cardíacas.
Moras y frambuesas
Los frutos rojos y las bayas son ricos en antocianinas, unos pigmentos solubles que son los encargados de darle ese tono púrpura tan característico. Gracias a ello bajan la temperatura del cuerpo a través de la circulación, eliminando el exceso de calor.
Zanahorias
Contienen un 87% de agua con altos niveles de vitamina A, fibra y betacaroteno. Todos estos componentes contribuyen a mejorar el estado del organismo y la piel, por lo que un consumo diario resulta especialmente positivo, y más en los días con temperaturas altas.
Espinacas
Uno de los vegetales más energéticos y nutritivos. Contiene un 91% de agua y grandes cantidades de betacaroteno, vitaminas y minerales esenciales. Comerla cruda es lo más recomendable porque así no pierde sus propiedades, pero vale la pena preparar con ellas cremas, arroces y otras recetas.
¿Cuéntame, te animas a preparar deliciosas combinaciones?