Nuestros hijos como miembros activos del hogar necesitan ir practicando ciertas tareas que aunque parezcan mínimas, les serán de mucha ayuda cuando sean adultos. A medida que los niños crecen, las responsabilidades deben irse incrementando para asegurarnos de que se sientan integrados a las dinámicas familiares. Quizás se pregunten qué tareas podrían aplicarse para niños, ya que es verdad que no todas son aptas para menores. Hoy quiero hablarles de una de ellas, ¡la más sencilla y divertida!: ahorrar.

Ahorrar es una de esas tareas que se pueden enseñar desde que son muy chicos. ¡Desde los 7 años los niños ya están capacitados para entenderlo y ponerlo en práctica! Queda en la habilidad y dedicación de cada padre, el poder animar a sus hijos a ahorrar. A continuación, quiero darles algunos tips que pueden funcionar:
• Lo primero es explicarles de manera sencilla para qué sirve el dinero y cómo lo obtenemos.
• Enséñales lo que significa ahorrar de una manera didáctica. Puede no ser necesariamente con dinero real, más bien puedes crear una lista de tareas, valores y responsabilidades que serán premiadas de manera simbólica y que irán sumando a su alcancía.
• ¡Hagan sus propias alcancías! Con una caja pequeña, pintura y escarcha, estarán listos para decorar sus alcancías como más gusten.
• Sus hijos deben plantearse una meta específica. Escribanla juntos.
• Pongan la alcancía en un lugar visible del cuarto, de esa manera la tendrán presente siempre.
• Opcionalmente, pueden plantearse un tiempo determinado para cumplir su meta.
• Pueden usar dinero de papel para representar cada actividad exitosa de tu hijo.