1. El mejor protector para las descargas es un cortapicos, para instalarlo debes conectarlo al tomacorriente y después enchufar tu electrodoméstico. Suelen tener un fusible que no permite el paso de energía en caso de una descarga, lo que protegerá al electrodoméstico de cambios energéticos causados por caídas de rayos o problemas en los transformadores eléctricos cercanos.

2. Revisa el voltaje de tus electrodomésticos. Lee el manual que viene con tu electrodoméstico, así sabrás qué tipo de voltaje necesita y prolongarás su vida útil.

3. Aléjalos de las ventanas o cualquier lugar donde se encuentren expuestos directamente el sol o puedan recibir disturbios magnéticos.

4. Limpia profundamente tu electrodoméstico. A veces la parte posterior suele almacenar mucho polvo, asegúrate de tenerlo limpio para evitar daños, sobre todo en televisores y también refrigeradoras, porque acumulan suciedad de la cocina en los ventiladores y esto puede dañar sus funciones de congelación.

5. Desconecta lo que no estés utilizando, pues a veces dejamos conectados los aparatos en casa, a pesar de que no los usamos. ¡Desconéctalos! No solo ayudaremos al medio ambiente, sino que evitaremos que se dañen con alguna variación de voltaje.